España camina firme gracias al trabajo en equipo

En definitiva sólo fue un pasito, al igual que los que dieron Italia y Francia con la consecución de los seis puntos en dos partidos. Pero hay pasos y pasitos y La Roja dejó una huella más grande y llamativa en su exuberante victoria ante una decepcionante Turquía. Del Bosque realizó una gran lectura de lo que requería el partido. Con los problemas a la hora de defender de Çalhanoglu y Arda, el camino a seguir era por las aceras. Con un péndulo en sus botas, Silva e Iniesta hipnotizaban por dentro mientras los correcaminos Alba y Juanfran rompían con sus desmarques de ruptura por fuera. España hizo un partido completo a partir de la activación tras pérdida en campo contrario. La presión fue coordinada gracias a la concentración de todos en sus obligaciones. Ver a Morata en el minuto 80 haciendo una cobertura a Juanfran, las ayudas en la presión y la movilidad de la gente por delante del balón son acciones que demuestran que La Roja ha llegado con mayor frescura a esta Eurocopa.

Aunque de la victoria ante Turquía quiero destacar más el bloque que las individualidades, reconozco que me llevé una gran alegría con los goles de Morata. Al verlo en directo me hizo recordar el día que me lo presentó con 15 años su ahora representante Juanma López. Con la misma voz entrecortada y una timidez que podría firmar el mismo Rafa Nadal, está cumpliendo los plazos que se le vislumbraban. Es un delantero moderno, capaz de jugar fútbol posicional aguantando la pelota o de jugar al espacio, con sus desmarques de ruptura. Reconozco que desde hace años tengo una fe ciega en Álvaro y gracias a esa humildad los plazos se van cumpliendo. Pese a este paréntesis que no me resistía a compartír, insisto en que este artículo es más para el colectivo que para las individualidades (aparte de que no me sale nada que no se haya dicho de Iniesta). Los nuestros pasaron a la siguiente fase con la huella más grande, pero no olvidemos que sólo es un paso y los torneos al final se ganan por dar el último paso bien dado y no por dar los pasos más grandes. Con esta frescura veo a España dando el último paso y el paso más grande.