Ya estamos en la tercera jornada de los grupos y ya ha terminado el A, con Francia primera, Suiza segunda y Albania tercera. Rumanía se va. Albania queda a la espera de otros terceros, pues se clasifican cuatro de los seis. En todo caso, venir aquí ya era mucho y ganar un partido es todavía más. Y que nadie se olvide de que llevó a Francia a las angustias de la ‘Zona Cesarini’. Albania, un país que ha sufrido y sufre muchísimo y que tiene gran parte de su población emigrada por cualquier parte de Europa, vivió ayer un día feliz. El fútbol no da soluciones, pero da alegrías, y de alegrías también se vive.

Pero lo que nos importa es que Francia sea primera. Si España gana su grupo, no encontraremos a Francia hasta una hipotética final. Va por el otro lado del cuadro, el mismo por el que irán, si salen campeonas de grupo, como es de esperar (y hasta de desear), Italia y Alemania. A nosotros nos caería por nuestro lado Inglaterra, de nuevo hay que decir que si sale campeona de su grupo. Inglaterra me está gustando, ‘hooligans’ aparte. En fin, que es importante empatar o ganar a Croacia (con empatar basta) para ir por el lado bueno del cuadro. Con Inglaterra, pero sin Francia, Alemania ni Italia.

He citado a los ‘hooligans’. Este está siendo el lado malo de este campeonato, la sorpresa desagradable. Empezó con los ingleses en Marsella, enseguida se apuntaron los rusos, que han resultado ser aún peores, y luego han salido otros. Los croatas, por ejemplo, muy severamente criticados por su seleccionador, cosa que no han hecho otros. Los húngaros han llegado a pegarse entre sí. Hay gente que mete bengalas en el campo, en un increíble descuido de la seguridad, que se defiende diciendo que las esconden en el recto. Una lástima, porque en esto el fútbol está dando un inesperado paso atrás.