Gran golpe del antidopaje español

Una de las mejores atletas del momento, y la mejor de todos los tiempos en la distancia de los 1.500 metros, la etiope Genzebe Dibaba, ha quedado en entredicho una vez que su entrenador, el somalí Jama Aden, haya sido detenido en Sabadell, acusado de tráfico y suministro de sustancias dopantes. Dibaba es la actual campeona y plusmarquista mundial de una distancia dominada por atletas bajo sospecha. Tal es así que los récords de la rusa Tatiana Kazankina coincidiendo con los años olímpicos (3:56 en 1976, y 3:55 y 3:52 en 1980) se consideraron insuperables, y así lo fueron hasta que por arte de magia aparecieron las atletas chinas en los años 90, y no una, sino hasta cuatro, superaron las marcas de Kazankina. Dejaron el récord en 3:50.46.

Las chinas desaparecieron tan rápido como vinieron. Quedó un gran vacío, hasta que Dibaba se hizo presente. No vino de la nada, pues fue campeona mundial júnior de cross; después, con 22 años, consiguió una gran marca en los 1.500, 3:57, que rebajó en ¡siete segundos! dos años después. Récord del mundo (3:50.07), campeona del mundo y diferencias siderales con sus rivales, que quedaban seis segundos por detrás. El equipo de Dibaba realizaba toda su preparación en España. ¿Por nuestra fama de paraíso del dopaje? Se equivocaron. Desde hacía un año se les vigilaba. Por lo pronto han aparecido EPO y anabolizantes. Si también están en el organismo de Dibaba, se verá con los análisis. Un gran golpe de la Agencia Española.