Sergio Ramos tomó una decisión valiente al lanzar el penalti. La situación que se vivió entra dentro de la normalidad, ya que en cualquier vestuario siempre existen dos o tres especialistas en lanzar las penas máximas. Las circunstancias del partido y la confianza de cada uno suelen determinar quién es el encargado de chutar y en esta ocasión fue Ramos. Es lógico que si el capitán de la Selección está con confianza y se ofrece a lanzarlo, lo haga, ya que por su trayectoria y galones se ha ganado que no haya que rebatirle su decisión. Sólo lo falla el que lo tira y probablemente si hubiera entrado todos los elogios hubieran sido para Ramos. Por tanto, hay que valorar la personalidad que tuvo para asumir la responsabilidad en un momento tan importante.

Lo que me parece evidente, además, es que esta situación en absoluto va a afectar al ambiente del equipo. Son todos futbolistas muy importantes y es normal que hubiera varios preparados para lanzar el penalti. Este grupo ha salido de situaciones muy difíciles en el pasado, han demostrado que saben venirse arriba cuando llegan las adversidades y existen motivos de sobra para creer en esta Selección. Desde la derrota contra Croacia se ha hablado mucho de lo complicados que son los cruces y de la oportunidad perdida por no ser primeros de grupo. Pero también hay que ponerse en la piel de los rivales. No creo que para Italia, Alemania, Inglaterra o Francia resulte agradable mirar ahora el cuadro y encontrarse a España como vecina...