Villar está entre Pelé y Caparrós

Villar es un tío muy listo. Por eso jamás da una puntada sin hilo. Está a punto de hacer oficial su candidatura a presidente de la UEFA, cargo que le impediría legalmente seguir al frente de la Federación (RFEF). Pero la jugada tiene truco. Si este periódico avanzó en la web su intención el 9 de mayo es porque conocía su estrategia. El plan de Villar siempre fue dilatar las elecciones en la RFEF hasta noviembre para así poder concurrir a las de la UEFA, que serán el 14 de septiembre. Si gana en la UEFA será el sustituto de Platini (quien por cierto hoy no asistirá a la final de su Eurocopa) y si pierde no tendrá impedimento legal para concurrir dos meses después a la reelección en la Española, que gobierna desde hace 27 años. Desde luego, lo tiene todo bien pensado.

Presidir la UEFA no es ninguna tontería. La organización reconoció un gasto global de 72,6 millones de euros en ‘gobernanza’ en el ejercicio 2014-15. Cada miembro del Ejecutivo FIFA, del que Villar forma parte, ingresa anualmente otros 300.000 euros, dietas aparte. Villar, de 66 años, tendrá dos rivales, el esloveno Ceferin (48) y el holandés Van Praag (68), aunque este último medita retirarse. Lo sabremos el día 20, día de cierre de las candidaturas. Antes, el viernes, se espera que Villar nombre seleccionador. Caparrós y Camacho están en la pole. Veremos. Todo es posible en el fútbol. Pelé, por ejemplo, se casa por tercera vez. Su novia Marcia tiene apellido madridista, Cibeles, y 33 años menos que él. Si Pelé puede con eso, Villar podrá con la UEFA.