Lopetegui reflexiona ante lo que viene...

Maroto habla con Lopetegui en AS sobre lo que nos viene. Lo que nos viene primero es un amistoso ante Bélgica (el 1 de septiembre) y de inmediato el grupo de clasificación para Rusia-2018, en el que chocaremos con Liechtenstein, Italia, Albania, Macedonia e Israel. No los coloco, claro, en orden de importancia, sino en el que nos los encontraremos. Conviene saber que sólo se clasifica el primero y que en caso de ser segundos, que supongo que es lo peor que nos puede pasar, tendremos que jugarnos a ida y vuelta la clasificación con otro segundo. Eso si no somos el peor segundo de nueve grupos, cosa que descarto.

En todo caso, Lopetegui no lo tiene fácil. Es cauto en sus declaraciones, pero todos sabemos lo que hay: el coche se ha parado, se ha estropeado, y hay que meterle piezas nuevas. Aquella máquina que puso en marcha Luis Aragonés tiempo atrás y que Del Bosque mantuvo, y hasta mejoró, ha petado por fatiga de materiales. Era un buen modelo, original, hermoso, elegante, inteligente. Incluso duradero. De hecho, duró. Pero no da más de sí, se necesita una renovación que Del Bosque no acometió por razones entendibles. Con esos jugadores vivió una gran aventura: ¿cómo decirles que les había alcanzado el tiempo?

Lopetegui entra nuevo, sin deudas. Manejó, sí, las dos promociones siguientes, lo que le da una perpesctiva privilegiada. Fue una buena elección. Pero, nos guste o no, lo que le toca gestionar no es tan bueno como lo que había. Casillas ya no es el prodigio que fue, y según supimos por un raro desliz de Del Bosque no traga con ser suplente. Puyol se retiró, Xavi Hernández, casi, Villa, otro tanto... Jugadores así no quedan. Hay que empezar de nuevo, con paciencia y audacia, con jugadores que no han contado hasta ahora. Espero con inquietud la primera lista del nuevo seleccionador. Marcará su intención.