Hace un año, Ruth Beitia ganaba la Diamond League como mejor saltadora de altura del año. Jamás un atleta español había conseguido tal galardón en ninguna otra especialidad. Ni siquiera en la mejor época de nuestros mediofondistas, cuando la Golden Four dejó paso a la Golden League, y ésta a la Diamond League. Pues de un año a esta parte, dos. Las dos de Ruth Beitia, que no para de encadenar éxitos: campeona de Europa en julio, campeona olímpica en agosto y ganadora de la Diamond League nada más comenzar septiembre. Como los más grandes atletas que lo ganan todo sin que la resaca de sus victorias les suponga merma alguna en su rendimiento. En España nunca habíamos tenido una atleta así.

¿Hasta cuándo? El próximo mes de marzo hay Campeonato de Europa en pista cubierta y Campeonato del Mundo al aire libre en agosto. Ruth Beitia tendrá 38 años. ¿Seguirá? ¿Quién lo sabe? Se retiró del atletismo hace cuatro años, volvió y ¡la que armó! Ahora descansará; luego ya se verá. Se incorporará a su escaño del Parlamento de Cantabria, y seguirá siendo la paladina de la lucha antidopaje. Ella fue una de las firmantes del manifiesto Por un deporte limpio a raíz de la Operación Galgo, y sobre los atletas implicados no dudó en afirmar: “Si alguien ha cometido un error, que lo pague”. Años más tarde, cuando Marta Domínguez fue sancionada, dijo: “Está donde tiene que estar, apartada”. Esta es Ruth Beitia. Una atleta y una persona ¡sin límites!