La plantilla del Plan B, del C y del D

Zidane lo tiene claro y no es demagogia: comanda un equipo de 24 jugadores, no de once. Asumo que los aficionados al fútbol tradicionales estábamos acostumbrados a recitar de memoria un once tipo y cualquier variante suponía devaluar eso que se llamaba equipo de gala. Pero eso ocurría cuando las temporadas tenían entre 40 y 45 partidos. Ahora se pasa de los 60 y hay en juego hasta cinco competiciones (afortunadamente, el Madrid tiene esta temporada la posibilidad de ganar un quintete). Por eso Zidane insiste en que quiere tener a todos contentos y enchufados, y eso sólo se consigue con minutos. Eso nos permite ver en la grada ante el Sporting de Portugal a Asensio e Isco y que cuatro días después podamos disfrutar de su talento en Cornellà...

Lo bueno de esta plantilla es que no sólo tiene un Plan B, sino hasta un C y un D. Jamás había visto un Madrid tan completo, versátil y fiable en todas sus líneas. En otras circunstancias, acudir a un partido ante el Espanyol sin Cristiano ni Bale suponía lanzarse al vacío sin red. Ahora, nada más lejos de la realidad. No sé qué ocurrirá esta noche ante los amigos pericos, pero no he visto a un solo madridista asustado por bajas tan ilustres. De lo que hablamos los vikingos es de la suerte de poder disfrutar hoy de gente como Lucas Vázquez (extremo que se matriculó con el Espanyol), el heroico Morata, el genial Asensio y el maestro James. Hoy tiene que ser la gran tarde del colombiano. Entre todos deben fabricar un triunfo que iguale el récord de Guardiola. Motivación máxima.