Luis Suárez, el asistente

Dos años del debut de Luis Suárez. Grandes números. 94 goles en 109 partidos. No sorprende tanto el número de goles como el de asistencias, 48. Cifra que engorda teniendo en cuenta la calidad de su receptor favorito, Leo Messi. La capacidad del uruguayo para dar el gol le viene de lejos, en el Liverpool se convirtió en el mayor asistente de la Premier. Virtud llamativa teniendo en cuenta la voracidad que demuestra en el remate. A la sombra de Messi, sí, complemento de Neymar, también, pero se ha ganado un sitio entre los mejores delanteros de la historia de nuestro campeonato.

El fútbol, de los futbolistas. Hubo un tiempo no muy lejano en el que presidentes de clubes y dirigentes del fútbol “competían” con los jugadores por las portadas de periódicos, por los minutos de radio y de televisión. Esta semana hemos vivido un claro déjà vu. García Pitarch calificando de “pequeño incidente” el lanzamiento de una botella a un futbolista; Tebas comparando a los jugadores del Barcelona con una partida de bolos; el Comité de Competición extralimitándose en su labor. Debates muy peligrosos sobre si la provocación llega a justificar la reacción de un violento. Todo en un partido en el que la gran noticia fue la lesión de Iniesta, uno de los artistas que hace que el fútbol tenga sentido.

De 1995 a 2016. ¿Se acuerdan de aquel Zaragoza de los 90? Aquel golazo de Nayim a Seaman, portero del Arsenal, para levantar la Recopa en París. El Zaragoza de Xavi Aguado, Poyet, Higuera, Esnáider, Cáceres y compañía. Un equipo fantástico. Arrancó este siglo levantando dos Copas del Rey: en 2001 al Celta y en 2004 una de las más recordadas de la historia del torneo, 3-2 al Madrid de Zidane, Beckham, Figo, Raúl o Roberto Carlos. Marcó un tal David Villa, Gabi Milito mandaba en la zaga, Movilla repartía y Cani desbordaba. No ha pasado tanto tiempo, pero sí han cambiado muchas cosas. El club ya no está en las mismas manos y ya no juega en Primera. En la última década trece cambios de entrenador. Hoy arranca un nuevo proyecto en La Romareda, Raúl Agné se sentará por primera vez en un banquillo que quema. Lo único que no ha cambiado es esa afición que merece más y mejor.

100 metros. Vean el Informe Robinson “El Reto de Ramón”, una historia que será llevada al cine. “Una de cada mil personas en España sufre esclerosis múltiple” lo dice Ramón Arroyo, persona que convive con la enfermedad desde los 32 años. El ejemplo de cómo el deporte se convierte en la mejor medicina para combatir la adversidad. Cuando sufrió el primer brote, su reto inicial fue completar caminando los 100 metros que separaban su casa de la estación de metro, ya no pararía hasta conseguir completar un Ironman (3.800 metros nadando, 180 kilómetros en bicicleta y 42 kilómetros de carrera a pie). Bravo por Ramón y por los que pelean directa o indirectamente contra la enfermedad, sea cual sea.