Javier G. Matallanas

Titular Reina y la furia de Iago Aspas

En sus dos primeras convocatorias, Julen Lopetegui decidió no hacer apenas cambios entre el primer y segundo partido. No podía permitirse un tropiezo y ante Bélgica y Liechtenstein, como ante Italia y Albania, casi repitió equipo. Algo que el seleccionador no creyó conveniente hacer con el equipo que dio buena cuenta de Macedonia y ayer realizó varios cambios para enfrentarse a los inventores del fútbol. No fue bueno el primer tiempo de España porque los ingleses apretaron como lobos. No podía Julen dejar sin jugar a tantos jugadores y no hacer debutar a Ander Herrera y a Iago Aspas. El delantero del Celta marcó un golazo como una catedral y lideró el ataque de furia de los españoles que acabaron empatando por pura fe a través de un gol de Isco en un final al más puro estilo madridista.

Volvió a verse la mano del entrenador en La Roja. Arrancó con tres centrales (Nacho es un defensa de categoría, lo hace todo bien) y acabó con línea de cuatro el mal primer tiempo. La titularidad de Reina traduce la confianza de Lopetegui en un portero al que considera el más completo de todos los cancerberos españoles. Para Julen, Pepe maneja las suertes de los porteros antiguos como el despeje de puños y el saque largo con la mano y atesora las condiciones que se exigen a los guardametas modernos, siendo uno de los que mejor juegan con el pie del mundo, vital para salir jugando. Por eso puso a Reina de titular en Wembley, porque su portero es De Gea y su segundo es Pepe. Y el que decide es él. Lopetegui hizo jugar a casi todos. España no firmó un gran partido, pero este empate in extremis sabe a victoria en la cuna del fútbol.