P. P. San Martín

¿Perder el Madrid? Ni a las chapas

Más allá de ser primero o segundo, lo que nunca desea un deportista es perder. Como se dice en el barrio: “¿Perder? Ni a las chapas”. Si hablamos del Real Madrid, entonces la opción de ‘dejarse ir’ no existe, no se negocia, no está en la historia del club. Estamos ante una cuestión ética que no admite especulaciones de bombos, de rivales o de cálculos matemáticos. En el Madrid se sale a ganar, y que Dios reparta suerte. El escudo pesa demasiado. Es imposible imaginar a Cristiano sin hambre de triunfo, o a Ramos, o a Carvajal, de sangre canterana. La palabra victoria está acuñada a fuego en las once Copas de Europa, con mucho honor ganado a pulso por una lista interminable de míticos jugadores. Pensar en si conviene o no ganar al Dortmund no se maneja en el vestuario madridista.

El punto de partida en la mentalidad del Madrid es bien distinto: más preocupados estarán los rivales de cruzarse con nosotros. Y así debe ser, porque igual puede aparecer el PSG que el Bayern, el Leverkusen que el Benfica... Igual da cualquiera que salga primero o segundo en la última jornada en el resto de grupos. Cuando un equipo quiere ser campeón y se siente con capacidad para serlo, donde tiene que mirar es hacia adentro, evaluar sus propias fuerzas y trazar una estrategia ganadora. Esta es la óptima situación del actual Real Madrid, cargado de confianza por su racha exitosa, liderando la Liga con amplitud y listo para viajar a un Mundial de Clubes donde pinta que puede hacer algo grande. Mañana saltarán los de Zidane a la hierba del Bernabéu sin más orden que la de ganar y que tiemblen los otros.