Tiene pinta de que a James le ha venido el TAS a ver

El relato de las cosas. Resulta que en estos tiempos todo necesita un relato. La realidad cada vez importa menos y sí importa la historia que se dibuje detrás. El Real Madrid ha conseguido que el TAS le dé parcialmente la razón y ha conseguido que el castigo para fichar se quede en una sola ventana. En Barcelona le preguntaron a Luis Enrique por el agravio comparativo. En el relato de esta época todo se postula desde la dicotomía Madrid-Barça. Lo que el TAS ha hecho es reconocer que el Madrid tenía parte de razón en sus reclamaciones, pero también que, a nivel formal, había hecho algunas cosas mal. Cuando te dan la razón es justicia y cuando te la quitan, falta de coraje.

El futuro de James. A veces no hace falta poner las cartas sobre la mesa para saber la jugada que se lleva. El colombiano eligió el peor momento para reivindicar lo que era un secreto a voces. Se siente un cisne tratado como un patito feo. Se sintió ninguneado nuevamente en el Mundial de Clubes y reivindicó su deseo de reflexionar sobre su futuro. Vamos, que quiere marcharse. La resolución del TAS le ha venido como anillo al dedo, con el Madrid pudiendo planificar y fichar en verano. Habrá que ver si algún club europeo de primera fila está dispuesto a pagar una cantidad cercana a lo que costó. Colombia mira a la Premier, pero la venta no es fácil y 80 son muchos millones de euros.

Messi. Dentro del campo, se expresa como nadie con el balón. Su exhibición en el derbi ante el Espanyol fue sencillamente admirable. La grandeza de Messi es, después de haber protagonizado alguna de las mejores jugadas de la historia del fútbol, su capacidad para sorprender de nuevo, para hacernos pensar que su mejor jugada está aún por llegar. Fuera del campo, Messi es un líder. Donde otros tienen el verbo, Leo tiene la mirada. Algunos quieren confundir ser el mejor del mundo —Messi lo es— con ser el mejor del año. El argentino hubiese preferido ganar la Champions y el Mundial de Clubes con su equipo y haber conseguido ser campeón continental con su selección. Messi daría todos sus Balones de Oro por el Mundial de Iniesta.

El volcán del Valencia. Es difícil vislumbrar en la lejanía lo que pretende Prandelli en Mestalla. La frontera entre la genialidad y la pérdida de papeles siempre fue muy delicada. Después de poner a los pies de los caballos a sus jugadores, ahora los declara a todos transferibles. Parejo lo ha puesto fácil, pero la gestión de la crisis y de la próxima apertura del mercado no puede ser más increíble.