Si el Sevilla amenazaba con presión y toque, la respuesta de Zidane fue una maniobra de guerrillas: centro del campo con Kroos-Casemiro-Modric y el apoyo por las alas de Asensio y James. Así se comió el Madrid la pizarra de Sampaoli, que salió con tres centrales y tibia presión. Resultó que en el minuto 10 Casemiro intimidó a Mercado y Nzonzi y dejó un balón a James para fabricarse el 1-0. Adiós Sevilla, bienvenido un Madrid tenso, con hambre, con Kroos y Modric al mando. El Sevilla perdió 30 balones en el primer tiempo y no le sirvió empatar en posesión al 50%. Y, cuando tuvo el gol, apareció Casilla. En la segunda parte Zidane dio armas a Isco para un panorama similar, con la línea media blanca devorándose al Sevilla, por más que dio algún coletazo. Los de Sampaoli perdieron hasta 71 balones y sólo recuperaron 47, mientras que el Madrid perdió 60 y recuperó 59. Los números explican el dominio del Madrid, aunque perdiera la posesión total, con 46%.

Casemiro al quite. Mercado salió jugando (1), Casemiro robó muy arriba (2), James recibió (3) y marcó (4). Presión, atención y pegada blanca.

Tres más dos. El partido fue de la media blanca. Sampaoli y los suyos se vieron sorprendidos por el dibujo de Zidane, con tres más dos por afuera.