Minuto 90 y Ramos...

Récord Real. Sólo el Madrid lo puede hacer. Nadie más. Otra vez en el minuto Noventa y Ramos. Esta vez fue Benzema, otro de los alumnos aventajados del camero, el que aplicó esa máxima que ya es ley: “El fútbol es un deporte en el que juegan once contra once y en el que siempre gana el Madrid en el minuto 93”. Fue un final de locura en un partido ídem. Con 3-1 llegué a tener sudores fríos ante un Pizjuán enrabietado que quería un final loco y un desenlace inexplicable (el 5-1 les metía en cuartos). Pero ahí apareció Casemiro ‘titular’ para forzar el claro penalti de Kranevitter. Sergio Ramos, cómo no podía ser de otra manera, los tuvo bien puestos para meterlo... a lo Panenka. Los tiene cuadrados. El capitán del Madrid. CON MAYÚSCULAS. Una pena que un sector de la grada le insultase de forma casi irreproducible. El chaval, con 19 años, llenó las arcas del club con los 27 millones de euros que dejó en caja. Y siempre habla con cariño hacia su primer amor futbolístico. Espero que este divorcio se soluciones algún día. Sergio no merece este castigo de su gente.

Bajas sonadas. Y eso que el Madrid salió de inicio a la caldera de Nervión sin Cristiano, Modric, Benzema, Carvajal, Varane y Keylor (todos por decisión técnica), y sin Bale, Pepe, Isco y James, ausentes por sus respectivas lesiones. Ya sé que un 3-0 en la ida daba para eso y mucho más. Tampoco olvido que con la segunda unidad el Madrid arrasó hace una semana a la tropa de Sampaoli en el Bernabéu. Pero ese día estaban Carvajal y Modric. Dos titularísimos que te hacen subir dos o tres peldaños. Pero da igual. Cuando Zidane mira a sus chicos les enciende las luces. Ayer le tocó a Asensio, que metió un gol a lo Bale en Mestalla. Cambien a Bartra por Vietto y les saldrá una gesta similar. La joya mallorquina se reivindica. Ese gol vale su peso en oro. Isco y James deben apretar. Hay tortas por esa cuarta plaza hasta que Bale regrese tras su lesión de larga duración.

‘Defecto’ Danilo. Pero no todo fue perfecto. Danilo cumplió con los peores presagios. Esta plantilla es la más cualificada del mundo. Lo reitero pese a los sufrimientos de anoche. Pero hay dos puestos que carecen de un suplente de garantías. Danilo está a años luz de Carvajal y Coentrao a varias galaxias de Marcelo. Con el resto de componentes de la segunda unidad el madridismo respira tranquilo. Hay plan B y plan C. Pero no hay antídoto para evitar que Danilo haga un Spasic con un cabezazo imperial que dejó helados a los morados. Casilla no se explicaba el remate de su compañero. Ese 1-0 fue el ejemplo de lo peligroso que puede ser el fuego amigo...

Gracias, Kiko. Un nombre propio que ayer corrió como la pólvora por el ofrecimiento jocoso de Paquirrín para salvar al Valencia. Pero hay otro Kiko mucho más formal y con guantes que ayer volvió a demostrar que la portería del Real Madrid está muy cubierta. Casilla fue clave en varias ocasiones. El récord también es tuyo, campeón.

Loas 40 principales. Le henos arrebatado al Barça otra bandera. El Madrid es el único equipo español que acumula 40 partidos seguidos sin conocer la derrota. Bestial. Pero la máquina de Zidane no se detiene. Ahora hay que ir a por los registros del Milán y la Juventus. Este récord va por Roque, de la Peña Sentimiento Vikingo Ciudad de Lepe, Santiago de Valdemoro y su maravillosa madre, Julio García Pacheco de Aldeanueva del Camino (Cáceres) y por Enrique Carbajosa Hernández, un madridista ejemplar que vio orgulloso las once Copas de Europa de su Real antes de dejarnos para siempre. Eterno Madrid.