Tan lejos y a la vez tan cerca

Resultan contradictorias algunas sensaciones que se respiran en Heliópolis desde la mejoría de resultados en los dos últimos meses. Con el décimo puesto marcado en rojo como objetivo obligado del conjunto verdiblanco en LaLiga, los números se acercan al mismo y las sensaciones se alejan al mismo ritmo que la planificación mantiene dudas constantes sobre su consistencia. Llegados a mediados de enero, ni llegó el ansiado y necesario central ni se corrigieron algunos errores que condicionan al plantel.

Víctor, eso sí, recondujo la situación deportiva como pudo hasta el momento. Se apoyó en la afición verdiblanca para mejorar los números en casa y espera sorprender hoy al Atlético con una renovada receta obligada por las numerosas bajas. Se presenta en el Calderón con las miras en recuerdos pasados que dejaron trofeos en sus vitrinas y que marcan una distancia casi infinita. La aparición de Dani Ceballos y la indudable brillantez de Rubén Castro pueden ser bases insuficientes para la construcción de un proyecto que no aporta más garantías a las ya existentes. Pero resultan, quizás, suficientes para soñar con sorprender al Atlético. Tan lejos del proyecto soñado, pero tan cerca del objetivo marcado.