Un Málaga con bajas y dudas

El Málaga no está jugando bien esta temporada, pero acumula 21 puntos, 12 de ellos sumados desde el minuto 76. Y eso no se compra en el supermercado. Lleva siete partidos sin ganar (cinco de Liga y los dos de Copa contra el Córdoba). No está en descenso, pero las sensaciones no son las mejores. Es una temporada extraña. Weligton (sin ficha por su lesión y para que jugase como extracomunitario Peñaranda), Kuzmanovic, Charles, Miguel Torres, Ricca, Sandro, Diego Llorente, Bakary Koné y En Nesyri son baja. Bien es verdad que han venido Peñaranda, Demichelis y Luis Hernández y que el club aprieta para que se incorpore cuanto antes N’Diaye desde el Villarreal. Reestructuración en vísperas de un partido nada menos que en el Santiago Bernabéu, un clásico que suele darse por enterrado pensando en el siguiente y donde la imagen, entendida como baño de autoestima, vale como un resultado.

El Málaga no está bien. Tampoco lo estaba el año pasado y se llevó un punto en una tarde donde Kameni hizo 14 paradas y debutó Pablo Fornals. Quizá, la opinión pública malagueña dé por perdido este partido y considere clave el de Pamplona de la siguiente jornada. Manuel Pellegrini ya lo hizo y se llevó un 7-0 de Chamartín. Y su rival posterior fue también Osasuna que ganó 0-1 en La Rosaleda, provocando una crisis terrible de la que se salió porque Julio Baptista marcó siete goles del tirón. La clasificación actual es mejor que entonces, pero la inestabilidad es similar. Y esto no es bueno para este Málaga con exceso de dudas y de Twitter...