De Burgos salió airoso

De Burgos Bengoetxea salió airoso del Vicente Calderón. Tuvo el partido controlado en todo momento, siguió el juego muy de cerca y en el primer tiempo perdonó dos tarjetas a André Gomes (24’) y Gabi (26’) porque dominaba la situación pero supo sacarla en el 31’ a Saúl por entrada por detrás a Messi para demostrar que llevaba el partido controlado. A continuación, en el 38’, a Savic por derribo claro a Messi. Solamente destacar en la primera parte, en el 34’, la falta por detrás de André Gomes a Griezmann cuando intentaba entrar en el área y que pudo ser de tarjeta. No hubo dudas en los goles de Luis Suárez y Messi.

En la segunda parte, el juego se volcó más en el área del Barcelona hasta el minuto 59 cuando llega el gol legal de Griezmann a pase de Godín, de cabeza. En esta jugada existe un agarrón de Koke a Luis Suárez, que iba hacia el área a defender pero sin opción de intervenir en la jugada. Por lo tanto el gol fue legal. En el minuto 82 se discutió una falta pero, a mi entender acierta, cuando Torres le toca el talón de la pierna izquierda a Piqué y se fue por la banda con el balón. En esta segunda parte tuvo que sacar muchas tarjetas y todas justas con lo que ha demostrado que no se cortó en ninguna de estas acciones.

Creo que el vasco hizo un serio arbitraje aunque al final se le pudo complicar. Fue en el minuto 91, al dar la ventaja después de un remate de Godín, estando en fuera de juego y antes de que Mascherano, dentro del área, agarrara a Gaitán. No pitó nada y dejó seguir el juego para que Cillessen parara el balón y diera continuidad al juego. Ahí se equivocó ya que tenía que haber señalado la posición incorrecta del jugador del Atlético antes del agarrón. Fue un partido muy intenso del que De Burgos Bengoetxea se puede marchar con la sensación de haber realizado un arbitraje más que aceptable.