Lim, como Tamara. "No cambié"

El nombramiento de Alesanco como director deportivo del Valencia, acabando con su interinidad, dejó frío (luego se calentó) al valencianismo. Porque más allá de ponerle cara a la persona que capitaneará la tan cacareada estructura deportiva "fuerte", o "al estilo Monchi", lo que se extrae del nuevo movimiento de Peter Lim es que no ha aprendido nada. Ni las salidas de Salvo y Rufete; ni las más recientes de Prandelli y Pitarch, ni la titubeante marcha del equipo en las dos últimas temporadas, le ha hecho reflexionar. Nada de todo esto le ha hecho variar ni un ápice su pensamiento inicial. El singapurense se posiciona junto al inaguantable estribillo de aquella pseudocanción que seguramente nunca habrá oído (por suerte para él), interpretada por la frikiartista Támara: "No cambié, no cambié".

Más allá de que las operaciones de Alesanco (y Vicente) en este mes y pico que llevan al frente de la dirección deportiva sean buenas (Carlos Soler, Zaza, Orellana...), la ilusión de un nuevo Valencia ha saltado por los aires. Habrá que ver quiénes son los hombres de confianza que estarán por debajo de Vicente pero el nombre de Alesanco suena a más lo mismo. A una nueva pata del banco que forman Lim, Mendes y el que se preste a colaborar con la causa. Lo de Vicente es lo que mejor suena y quizás los nombres de los ojeadores también ilusionen a la parroquia. Pero si Salvo, Rufete, Prandelli o Pitarch no pudieron hacerle comprender nada desde primera línea, me temo que poco podrán hacer estos desde segunda o tercera. ¿Le dejarán trabajar? Seguro ¿Decidir? Tengo más dudas.