Cautela y tiempo para más pruebas

Viendo el partido, las imágenes de televisión, han sido impactantes, incluso para los médicos, que estamos acostumbrados a los avatares traumáticos del fútbol. Nada más caer al suelo, se ve que el jugador está totalmente inconsciente y golpea con la cabeza el suelo con el cuello totalmente flácido. Inmediatamente los compañeros ven que hay una obstrucción de las vías respiratorias y se desata la alarma, llamando rápidamente a la asistencia médica.

El parte médico nos dice que es un traumatismo cráneo encefálico, que está estabilizado y es trasladado al hospital para realizar las pruebas correspondientes. En este tipo de traumatismos cráneo encefálicos, con pérdida de consciencia, hay que ser cautos a la hora de emitir juicios de opinión, hasta que no se hagan los estudios médicos correspondientes. Pero se trata de un traumatismo grave, que no hay que minimizar, ni alarmar en exceso, ya que la pérdida de consciencia indica que ha habido una conmoción cerebral, debida a la contusión recibida y este tipo de traumatismos requieren siempre un periodo de tiempo para saber si realmente va a tener alguna repercusión a nivel neurológico. Por otra parte, hemos observado, cómo el cuello ha caído a plomo, lo que ha podido también provocar algún daño a nivel medular, de ahí el buen hacer de los médicos al retirar al jugador del terreno de juego con collarín cervical, hasta la realización de las pruebas radiológicas.