Con Busquets todo es más fácil

Imperial. Articulada bajo la jerarquía de Busquets, España acuñó un triunfo de crédito absoluto en Francia. El centrocampista, titular en los ocho partidos de la era Lopetegui, descorchó su mejor versión: 63 pases con un 95% de precisión y 14 recuperaciones.

Fluidez. El gobierno de Busquets definió a España en la medular y dio sentido al inicio de cada jugada. Estuvo bien arropado por un Koke de orden y con mando en campo contrario (51 pases en terreno de juego rival).

Aparición. Con todo, a España le faltaba finalización hasta que irrumpió Deulofeu. Su impacto alteró el mapa del partido. Provocó un penalti y sentenció después con apenas diez toques de balón.

Pobre Francia. El empeño de Deschamps de fiarlo todo a la dimensión física de su equipo le continúa penalizando. La contra con Mbappé, Griezmann y Gameiro emergió como su única arma de alcance. El jugador del Mónaco no deslució: 11 pases sin tacha y un ocasión clara de gol.

Cobertura

Busquets demostró su inteligencia habitual para ser decisivo en las ayudas. Un ejemplo: robo de balón a Mbappé en el minuto 20.

Al corte

La jugada del 0-2 se originó en otra recuperación de Busquets. Su mérito no se quedó ahí. Orientó la transición ofensiva con un gesto técnico magnífico.