La ruta de Marcelo será la baza de Zidane contra el Leganés

Peligro. El trance contra el Alavés, saldado con un resultado engañoso, debe poner en alerta al Madrid. Ante el Leganés podría caer en la trampa de tratar el partido con una ligereza inadecuada ante lo que está por venir (Atlético y Bayern). Sería una metedura de pata importante. La referencia de Eibar (1-4), con los meritorios al frente, es la correcta.

Por las alas. El Leganés se ha ganado el derecho de ser reconocido como un conjunto realmente incómodo. Se viste desde abajo y apenas concede ocasiones al rival. Únicamente recibe diez disparos en contra (sólo la Real, el Barcelona y el Madrid presentan mejores datos). La ruta de expedición para el conjunto de Zidane apunta a ser los costados con la irreverencia de Marcelo. Sus funciones ofensivas (dos goles y nueve asistencias) comprometen a cualquier equipo. Conveniente parece también la titularidad de Lucas Vázquez.

Transición. Sería una contrariedad para el Madrid carecer de vivacidad en la circulación. El equipo de Garitano se acoraza bajo una disposición de líneas muy juntas y no tiene inconveniente en detener el juego con faltas (18 infracciones por partido, el que más de LaLiga). James, cuyo regreso al once se presupone, debe ser el guionista del encuentro y no abusar del toque de balón.

Armas locales. Este Leganés no sólo se protege bien. Es un conjunto gremial y ambicioso que acumula hombres en campo contrario. Las incorporaciones de Diego Rico y sus combinaciones con Szymanowski afianzan su potencial por la izquierda. Por dentro asoma el descaro de Gabriel (136 regates intentados). Casemiro se ocupará de su vigilancia. Es ineludible para el Leganés afinar su puntería ante el Madrid. Marca un gol cada 13 remates, el registro más bajo de toda la competición.