Ha sido aparecer Mateo Alemany por Mestalla y el Valencia encadenar su mejor racha de la temporada. Con la de Granada, tres victorias consecutivas y, en las dos últimas, dejando el equipo buenas sensaciones por actitud y talento. No. No tiene (ni quiero darle) mérito en ellas al nuevo director general. A fin de cuentas ni él marca goles ni tampoco le ha dado tiempo como para meter mano en nada de la parcela deportiva. Bueno, en algo sí, en digerir con calma el affaire Cancelo, que ha pasado de mandar callar a Mestalla contra el Deportivo a ser uno de los mejores contra el Celta y el Granada,y también creo que en algo ha podido influir diciendo aquello de que “no es lo mismo ser el 14 que el 12, el 12 que el 10”. Pero el mérito de las tres victorias consecutivas es de los futbolistas y de Voro.

A día de hoy, Voro está más lejos que cerca de seguir en el banquillo. Alesanco está informándose sobre terceros, como le han encargado. Además, la forma de decir Alemany en Onda Cero: “No veo a Voro ya de delegado”, puede incitar a interpretar sus palabras como tampoco de entrenador. Pero solo descartaré a Voro el día que le escuche decir públicamente: “Yo no quiero seguir”. Porque puede que no les falten argumentos a quienes piensan que el Valencia necesita hacer borrón y cuenta nueva y ello implica o empieza por el banquillo. Pero, esto es fútbol, y como la racha se prolongue más allá del Sevilla y del Madrid...