El Valencia nos quitó dos Ligas

Sé que cada temporada es una historia distinta, con matices que impiden compararla una con otra. Pero sí que hay algo que se ha repetido casi sistemáticamente los últimos años: el Valencia suele mojar la oreja al Madrid en el Bernabéu. Recuerden que en las postrimerías de la última Liga con Ancelotti (2014-2015) nos desquiciaron al equipo adelantándose con un 0-2 inesperado, a lo que se unieron un penalti fallado por Cristiano (¡siempre Alves!) y un remate al palo de Chicharito. El Madrid remó río arriba y llegó a empatar al final con un golazo de Isco, pero los prodigios de Alves evitaron la remontada. Esos dos puntos perdidos costaron el título. Y en la Liga anterior, ídem de ídem. Después de ir perdiendo 1-2, Cristiano evitó la derrota con un espectacular gol de tacón, pero eso no logró que volasen otros dos puntos de oro que a su vez se llevaron el título para el Calderón (el Atleti ganó esa Liga en la última jornada en el Camp Nou...).

Por eso, Zidane haría bien en no planificar un once pensando en el derbi de Champions del próximo martes. Distraernos con Europa supondría distraerse en la Liga, en la que ya no hay margen para hacer concesión alguna después del 2-3 del Clásico. Lo curioso es que no sé cómo pedirle a Zizou que saque el once de gala, dado que en ese caso le tendría que pedir que alinease a cinco o seis de los habituales suplentes. Para ganar al Valencia yo alinearía a Isco (por Kroos), a Asensio (para ocupar el hueco de Bale) y a Morata (Karim vuelve a estar melancólico y no se merece la titularidad). El Valencia de Voro dará guerra. Partidazo.