Juventud. Juanma Lillo debutó en Primera con 29 años, había conseguido dos ascensos con la UD Salamanca, un auténtico niño prodigio de los banquillos. Julian Nagelsmann también tiene 29, salvó al Hoffenheim del descenso y este año lo ha clasificado para la Champions, es la sensación de la Bundesliga, más que cualquier jugador del campeonato. Es un mes más joven que Messi, y comparte quinta con su mejor delantero centro, Adam Szalai, aquel húngaro que se hinchaba a marcar goles en las categorías inferiores del Real Madrid. Es un entrenador probeta, fruto de un giro de la federación alemana de fútbol en el año 2000, un nuevo plan para alejarse del ‘cuadriculado’ entrenador alemán. Alumno de Tuchel, míster del Dortmund, amenaza con adelantarle por la derecha. Se dice que está en la agenda de grandes clubes europeos, incluso del Sevilla. Julian y Juanma comparten el deseo de innovar, de aplicar nuevos métodos. Sigan su carrera, puede que acabe teniendo la gran oportunidad que se le ha negado hasta el momento a Lillo.

Nacho y diez más. ¿Cuánto vale en el mercado un futbolista capaz de actuar en las cuatro posiciones de la defensa? Es más, ¿los hay? Se cuentan con una mano. El Joker de la baraja es Nacho Fernández. Son ya más de 200 partidos oficiales con el Madrid, no es tontería. Nacho es esa carta que en Europa no se da, lo más parecido puede ser Azpilicueta en el Chelsea. Supongo que es injusto darse cuenta de la gran entidad de un jugador a través de la lesión o sanción del titular. Luis Enrique o Simeone se habrían ahorrado algún dolor de cabeza con Nacho en sus plantillas. Si Pepe se marcha a China, con Vallejo como meritorio de futuro, Nacho se convierte en imprescindible. Más aún con los problemas físicos de Varane.

Gran aparición. Mbappé será el culebrón del verano, no tengo duda. No recuerdo en la última década una irrupción tan exuberante al margen de la de Neymar en el Santos. Dudo que Jardim sea capaz de sujetarlo una temporada más en Mónaco. Pensé que el miércoles iba a ser el primero en batir en jugada a Buffon en la presente edición de Champions. Estuvo muy cerca, atacó un buen centro de Dirar, Gigi aguantó en el primer palo y la sacó. Hizo buenas cosas, no fue su mejor día, no le hizo falta, a la legua se ve lo bueno que será, además estos meses con Falcao le están viniendo de perlas para aprender el oficio. Se sabe que a los periodistas deportivos nos encanta comparar por arriba, no me voy a quedar corto, cuando veo cómo sale de la bicicleta me recuerda a Ronaldo Nazario. Es potente en carrera, con el balón en el área piensa poco, fuera crea más. También diré que si llega a ser un tercio de lo que fue el mejor delantero centro que existió jamás, su carrera será un éxito. Si se pagaron 80 millones por Martial o 120 por Pogba, apuesto a que se pagarán 100 por Mbappé.