En el Top 10. ¿43 millones de libras (49 de euros) son muchos o pocos? Depende. Si es para fichar a Bernardo Silva, que es a lo que nos referimos, me parecen demasiados. Es lo que paga el City al Mónaco, que a este paso (Mbappé, Lemar, Mendy...) va a hacer caja para poder cerrar sus oficinas y tomarse diez años de vacaciones. Silva tiene clase, no lo discuto, pero los 43 millones son palabras mayores. Con esa cifra se cuela en el Top 10 de los mayores fichajes en la historia de la Premier. Abre la lista Pogba (93 millones de libras) y en ella hay dos españoles: Torres (50 millones del Liverpool al Chelsea), cuarto, y Mata (37 del Chelsea al United).

Web en idiomas. Globalización. Es la palabra de moda, no se si hay que repetirla del desayuno a la cena, pero casi. La agencia de traducción en línea One Hour Translation ha realizado un estudio sobre localización de los 32 clubes de la Champions 16-17, es decir, qué webs se traducen y a qué idiomas. 12 clubes hicieron localizaciones al chino, 11 al español, seis al árabe... ¿El que más se vuelca? El Manchester City, con páginas web en 12 idiomas además del inglés. Le siguen el Barça, con nueve además del español, y el Real Madrid, con siete además del español. En próximas fechas daremos más detalles del estudio. Lo haremos en español. De momento...

Totti en dos gestos. Dos apuntes de Totti, los dos buenos. Uno, las muestras de cariño que se suceden hacia él en la Roma (su hogar) y en clubes de medio mundo tras su retirada del fútbol. Algo tendrá el agua cuando la bendicen... Y dos, una frase: “Estaríamos igualmente contentos si no trascendiese”. Se refiere al hecho de que la Roma haya destinado al Hospital Pediátrico Bambino Gesù el dinero de las multas impuestas a los jugadores durante la 2016-17. De un mal (esas multas), hacemos el bien. Cuando el fútbol muestra su mejor cara también hay que decirlo.

El Múnich que no brilla. Tres pisos más abajo. Ahí es donde está el TSV 1860 Múnich, la cara triste de una ciudad en la que el fútbol acostumbra a sonar bien. Pero lo que ahora se respira en las oficinas de los leones es pesar tras el descenso a Tercera División. Las cosas van mal en lo deportivo y rematadamente mal en lo financiero, donde la bancarrota sólo se evitará si Hasan Ismaik sigue vinculado al club. Sin el dinero del millonario jordano, el TSV 1860 Múnich podría seguir bajando escalones, hasta la Cuarta División o la Quinta. Y pensar que en 1966 ganó la liga alemana. Era tan feliz viviendo en la azotea...