El gran reto que tiene Zidane

Ganar la Champions League no es una empresa fácil, incluso en el Real Madrid. En los últimos tiempos sólo ha habido cuatro técnicos que lo han logrado: Heynckes, Del Bosque, Ancellotti y Zidane. A pesar de los triunfos, la hegemonía del fútbol mundial de los últimos años ha correspondido al Barcelona, que aparte de ganar exhibió un estilo de juego brillante y dominador, asentado en un modelo característico de centrocampistas y en la presencia del jugador más decisivo del fútbol planetario. El Madrid, obligado por su ADN, ha sido el único club del mundo que aguantó la competencia, aunque fuera apretando los dientes y sin tocar violines.

Este año algo ha cambiado, porque el Madrid de los últimos dos meses, además de ganar, ha sido el que mejor ha jugado, el que ha asombrado a todo el mundo y el que ha levantado la admiración de afines y rivales. Conservar esa matrícula los próximos años es el gran reto de Zizou. El equipo dominador y mandamás que ninguneó a la Juve en la segunda parte de la final de Cardiff tiene que seguir siendo la impronta de lo que viene, la referencia del juego y el estilo. La plantilla está llena de jóvenes que aún pueden progresar mucho, entre ellos Asensio, que debe seguir creciendo para ser franquicia del club. Conseguir todo esto sería hacer época.