Varias cosas quedaron claras ayer en Macedonia a un año del Mundial de Rusia, que jugará España salvo catástrofe. Quedó claro que Costa es titular con la Selección por delante de Morata. Quedó claro que Lopetegui buscará un hueco al talento de Isco por delante de la potencia, la altura y la intensidad de Vitolo. Quedó claro que Thiago Alcántara está por delante en la titularidad que Koke Resurrección. Y que Busquets es intocable por más que Illarramendi sea uno de los preferidos de Lopetegui del grupo que salió campeón de Europa con la Sub-21 cuando Julen los dirigió. También fue una evidencia que Iniesta será titular siempre que esté bien físicamente y que David Silva cuenta con la plena confianza del seleccionador, que posee fe ciega en el canario como la tuvo Luis Aragonés, y el otro mago de Arguineguín le devuelve ese apoyo incondicional con goles (ayer volvió a marcar y se acerca a Torres, que con la confianza del Cholo peleará por mantenerse en su podium con Raúl y Villa apurando sus opciones de volver con La Roja para jugar su cuarto Mundial en Rusia 2018).

España fue muy superior a Macedonia y De Gea, el mejor portero del mundo, apenas tuvo trabajo. Lopetegui camina firme al Mundial de Rusia. Nos queda ganar a Italia en el Bernabéu en septiembre para evitar sobresaltos de repescas y para optar a volver a ganar un Mundial. ¡Vamos!