La Super-21 y la mejor Euro de siempre

Desde aquella Eurocopa en Montjüic que acabó con derrota por penaltis de España ante Italia no recuerdo un torneo tan interesante a esta edad como el que hoy comienza. Los Raúl y De la Peña cayeron entonces ante los Buffon y Totti, preludio de lo que luego serían sus magníficas carreras. Una final épica, inolvidable. Pese a ello, sin embargo, la sensación es que esta Eurocopa no siempre reúne a los mejores Sub-21, la mayoría instalados ya en las selecciones absolutas. Y no por España. La FEF y sus técnicos han sido de los pocos que han respetado la cita y han llevado a sus mejores jugadores. La generación de Valerón y Guti en el 98, la de Javi Martínez y Mata en 2011, la de Thiago e Isco en 2013… Fueron equipos extraordinarios y además campeones.

El resto de países, más reacios a bajar a la Sub-21 a joyas de la absoluta, se han animado esta vez a repetir la fórmula española. Ocurre con Portugal, que ha convocado a Renato Sanches (Bayern) o Guedes (PSG). Pasa lo mismo con Italia: Donnarumma (Milán), Rugani (Juventus), Gagliardini (Inter) y Bernardeschi (Fiorentina). Y qué decir de las selecciones como Polonia, Serbia, Macedonia o República Checa, repletas de internacionales A. Eso convierte la Eurocopa Sub-21 que hoy comienza en la mejor que uno recuerda, pese a que Inglaterra y Alemania sí van con equipos más descafeinados. No así España, que como siempre vuelve a llevar lo mejor que tiene. Un torneo para disfrutar de la Rojita y del futuro del fútbol europeo. Tomen asiento.