Pickford. Inglaterra se la juega hoy ante Eslovaquia y los focos volverán a centrase en su portero Pickford. El Everton ha pagado 30 millones por él, convirtiéndolo en el tercer guardameta más caro de la historia. Sólo Buffon y Ederson, que acaba de llegar al City, le superan. Un buen año en el Sunderland y el penalti parado ante Suecia en el debut le avalan. ¿Pero como para pagar 30 millones?

Súper-21. Los elogios se centran en Asensio tras el debut de España y es lógico. Sin embargo, si uno mira el equipo y la lista española se da cuenta de que hay mucho más. Ante Macedonia se quedaron sin jugar Odriozola, Merino, Mayoral, Soler... Y no están ni siquiera en Polonia jugadores como Camarasa, Óliver, Samu Castillejo, Munir, Santi Mina o Bautista. Casi nada.

Dahoud. La mezcolanza sigue apareciendo en la Mannschaft. Jugadores como Dahoud aportan un estilo completamente diferente al que siempre fue el alemán. El nuevo centrocampista del Dortmund nació en Siria y llegó a Alemania siendo niño, como tantos otros refugiados que ha acogido el país germano. La DFB ha estado rápida para asegurarse su talento. Brilló en el Gladbach y lo hará en el Dortmund. Y en la Sub-21 germana, claro.

Chiesa. Su padre Enrico fue un reconocible Internacional italiano que militó en Parma, Sampdoria y Lazio, entre otros. Federico, el menor de los Chiesa, apenas inicia su carrera dejando cabalgadas en la Fiorentina y la Sub-21. Tiene ante sí el reto de cumplir con las expectativas generadas y también de superar el listón de su padre. Siempre complicado ese estigma para el futbolista que además es hijo de futbolista.