Me encanta el sueco y el ghanés, útil

Diestro pero fenomenal en la banda izquierda, hábil, a veces le cuesta terminar las jugadas, pero sin duda extremo de verdad. Wilhelmsson lleva tiempo demostrando su nivel en el Anderlecht y la selección sueca con la que se exhibió en un reciente amistoso ante Escocia. En aquel partido desmostró todo su repertorio. Le gusta jugar en la izquierda, aunque puede rendir bien en la derecha. No es un extremo muy rápido, pero tiene muy buen desborde, y será por lo tanto indiscutible en la selección. Harry Kewell no llega a su nivel. Zurdo, en el Liverpool de Houllier insistía con él en la banda derecha y eso le hizo mucho daño. También las últimas lesiones, como la que ha sufrido hasta hace poco en el tendón de aquiles. Segundo punta en la selección australiana y algunas veces extremo en el Liverpool, no ha terminado de demostrar en Anfield los detalles que dejó en el Leeds.

S u adaptación al fútbol español sería algo complicada. No tiene el desborde de Wilhelmsson y su recuperación sería difícil. El ghanés Appiah tiene muy poco que ver con los otros dos. Centrocampista potente, todo despliegue físico, sorprendió con unas buenas cifras goleadoras en el Brescia, cuando jugó por delante de dos medios centros. Luciano Moggi se enamoró de él y llegó a la Juventus de Lippi con la sensación de que se consolidaría en ese estilo tradicional juventino de fútbol rocoso y muy táctico. Pero no. Appiah necesita algo de libertad para llegar al área rival y Capelllo lo vio claro desde el principio. La llegada de Emerson y la reconversión de Camoranesi le han dejado sin ninguna opción. Un futbolista casi olvidado en la Juventus, pero con experiencia y potencia como para ser un buen centrocampista de acompañamiento en el fútbol español.