Luis tira por la calle de en medio. A cuatro días del debut deja claro que nadie es titular indiscutible, que vuelve a barajar las cartas y que todos, incluido Raúl, se pueden quedar en el banquillo si otros lo hacen mejor. Se lo ha debido de decir en privado a ellos porque ayer por la mañana volaban los tacos de las botas. ¡Vaya manera de repartir unos y otros! El que se arrugue no estará entre los elegidos. Es algo que hemos echado en falta en los amistosos, un punto más de agresividad a la hora de recuperar el balón, porque sobarla ya la sobamos. Y para que entiendan el mensaje, los más entonados en Ginebra, Xavi y Joaquín, trabajaron por la tarde en el presunto equipo titular.

Si al seleccionador le preocupaba el tedio antes de concentrarse, ahora deberá protegerse de la ansiedad. En contra de lo que opinan otros, creo que no nos viene bien ser los últimos en salir al escenario mundialista, que eso genera inquietud. Si a esa larga espera unimos la indefinición del técnico a la hora de decantarse por un equipo de confianza, entenderemos que los próximos días van a ser duros para los jugadores. Pero, para eso está el psicólogo. Aunque conociendo a Luis, y desde el respeto que nos dan sus ayudantes, es él quien trabajará más ese aspecto. Jugando al gato y al ratón, enviándoles mensajes por la Prensa, mirándoles a los ojitos....