Presidentes marginados

Presidentes marginados

No se puede negar el entusiasmo con que se ha tomado Gallardón la candidatura de Madrid 2016. En seis días le ha podido contar el proyecto a medio millar de personas directamente. El pasado jueves, a unas doscientas en un almuerzo tras el anuncio de la candidatura; ayer, a unas trescientas en los desayunos de Europa Press. Empresarios, gentes de influencia y periodistas han sido los receptores de su mensaje. El mundo del deporte no ha estado, en cambio, muy presente. Sí con su más alta representación a través del CSD y del COE, pero en estas citas se ha echado en falta a los presidentes de las federaciones olímpicas. Además de que en esto de los Juegos son alguien, entre quinientas personas 29 más no se hubieran notado.

Los empresarios por supuesto que son importantes, pues son quienes financian el proyecto, pero a la postre los que lucharán por el voto cuerpo a cuerpo son los presidentes de las federaciones, no Florentino Pérez, Cerezo o Villar Mir. De nuevo los presidentes se sienten marginados, como sucedió cuando no fueron invitados a Singapur. Lo del efecto dinamizador, el factor de crecimiento, el enorme potencial de Madrid, de que sea la sexta ciudad europea más atractiva para los inversores y de que en datos económicos sea la tercera está muy bien. Es un discurso directo y medido para los empresarios. Pero tampoco estaría de más un guiño a los presidentes. Ellos también tienen derecho a conocer el proyecto de propia voz del alcalde.