¡Que la Real rompa con los árbitros!

¡Que la Real rompa con los árbitros!

Basta ya con los árbitros! ¡Hasta aquí hemos llegado! Estas expresiones que esta semana ha hecho famosas Ana Urkijo, presidenta del Athletic, cuando anunció la ruptura de relaciones con la Real, sirven para reflejar el sentir de la familia realista con las actuaciones arbitrales. La eliminación copera ante el Málaga es la gota que colma el vaso. No se puede decir que Megía Dávila apeara con sus decisiones a la Real, pero no negarán que su arbitraje, con el gol del Chenge Morales (falta y fuera de juego) como colofón, perjudicó a los de Lotina, cuando se olía el 3-0 y el pase a octavos. ¿Que luego igual no lo hubiesen logrado? Tampoco les dejaron. ¡Pero si no se atrevió a sacar una amarilla hasta el minuto 88!

El problema es que llueve sobre mojado. La ida de esta ronda copera en La Rosaleda, los goles con la mano de Aduriz y Arruabarrena, la expulsión y penalty de Gerardo ante el Zaragoza. Hasta cinco puntos más podía tener la Real. Aunque no se engañen, la culpa no es sólo de los de negro. Mala planificación, carencias, pésimo juego. ¡Ya basta! Los realistas no quieren regalos, pero tampoco robos. ¡Rompan las relaciones con los árbitros!