Todo lo bueno de Alonso

Todo lo bueno de Alonso

Nunca nos cansaremos de repetir lo mucho que el automovilismo español le debe a Fernando Alonso. Y no sólo por el evidente valor de sus éxitos, también por el tsunami mediático, social, económico e incluso político que han provocado sus triunfos a favor de este deporte. Que Valencia vaya a tener un gran premio de Fórmula 1 se debe en buena parte a él. Les aseguro que esta teoría no es ningún disparate ni, desde luego, un halago fácil al piloto de McLaren. Si el campeón asturiano no existiera, ni el presidente Camps tendría interés en la F-1, ni Ecclestone en tanta consideración a España, ni la Prensa apoyaría el proyecto, ni los patrocinadores aportarían el dinero necesario para sacarlo adelante. Es así de simple y no reconocerlo sería de desagradecidos.

Es una estupenda noticia que nuestro país vaya a disfrutar de dos grandes premios, entre otras razones porque nos sitúa al máximo nivel del automovilismo internacional, al nivel de naciones con la tradición y el peso específico de Alemania o Italia e incluso por delante. Refrenda que aquí sabemos hacer bien las cosas (ahí tenemos dos ejemplos de rabiosa actualidad como son la Copa América o este fin de semana la carrera de Montmeló) y que esa capacidad no pasa desapercibida fuera de nuestras fronteras. Además, el circuito urbano de Valencia será puro espectáculo, deportivo y visual, eso está garantizado. Lo que ya no tengo tan claro es cómo habrá caído la noticia en otros circuitos estables. Apuesto que ellos tenían otra idea del asunto