Dos partidos y el auto de una jueza

Dos partidos y el auto de una jueza

La Liga vuelve entre tambores de guerra televisiva. El auto de la jueza no ha resuelto el conflicto, al menos provisionalmente, tanto como cabría esperar. A pesar de que su planteamiento resulta inequívoco en el sentido de fijar a AVS como legítima poseedora de los derechos para esta temporada y de exigir a Mediapro que deje de interferir en la explotación y que pague las costas de la demanada, la sutil alianza entre esta sociedad y la Liga ha imaginado una escapatoria en la interpretación inverosímil de una salvedad de la sentencia, según defendió Javier Tebas en El Larguero. Para crear confusión.

El caso es que AVS ofreció el partido Villarreal-Barça para La Sexta, en abierto, con la intención de reservarse el Espanyol-Madrid, junto a otros partidos, para el ppv. A la Liga le faltó tiempo para, al fijar los horarios, colocar el Espanyol-Madrid a las 22.00, el horario habitual del abierto en La Sexta, y, por contra, el Villarreal-Barça a las 20.00, horario de ppv. Ahora AVS responde insistiendo en su derecho a ofrecer en ppv el Espanyol-Madrid (aunque sea las 22.00) y ofreciendo a otros operadores la transmisión en abierto del Villarreal-Barça. Los dos partidos son equivalentes en interés. Se trata de ver quién puede más.

Y ya no es sólo la Liga quien está en el lance. Son también TV3 y Canal 9, cuyas cámaras entrarán en los respectivos campos en disputa, y que conocen la sentencia, y que decidirán a quién y para qué uso posterior entregarán la señal. Y ya no estamos frente a una discusión jurídica en el aire, sino ante un auto de medidas cautelares, cuya eventual desobediencia provocaría responsabilidades penales. Pase lo que pase este fin de semana, me temo que el lunes estará de nuevo el asunto en los juzgados. Y, esta vez sí, quedará resuelto, supongo, para lo que resta de temporada. Con alguna víctima, me figuro.