Un proyecto para devolver la sonrisa a Bernd Schuster

Una de las razones por las que Schuster se ha encastillado en el club se refiere al desequilibrio que observa en la plantilla. Él lo advirtió en la pretemporada, en conversaciones con Pedja Mijatovic y José Ángel Sánchez. No fue posible por entonces, pero si hubiera estado en su mano, el alemán se habría traído a Diego y Drogba en el mismo avión. Según su criterio, eran los jugadores perfectos para reforzar el medio campo y multiplicar la efectividad goleadora. No pudo ser, decimos, y ahora el entrenador se encarga de recordarlo en algunas reuniones de trabajo. Diego, especialmente, habría evitado esas lagunas en la zona de creación y llegada desde segunda línea. Efectivamente, en el club lo entienden así y por eso ya se han lanzado las redes para contratar al brasileño del Werder Bremen.

En cuanto a Drogba, la opinión de la dirección técnica prefiere girar a Huntelaar. Y a Schuster tampoco le disgusta esta elección, faltaría más. Es un goleador acreditado, joven y con margen de proyección. De tal modo, las maniobras que ya se mueven en los despachos del Bernabéu tienden a cubrir las necesidades expuestas por Schuster y a perfilar una plantilla competitiva y equilibrada para la próxima campaña. No digamos si cuaja la compra de Cristiano Ronaldo, la joya más preciada. No hay razón de peso, realmente justificada, para que Schuster siga trabajando cabizbajo y enfadado con el mundo. El Madrid tiene un plan para devolverle el optimismo y la sonrisa, aunque depende de su actitud que las aguas vuelvan a su cauce. En el club no dudan de su categoría, pero debe colaborar.