Siempre hubo curiosidad por saber qué haría la Selección en la NBA. Pues ya lo sabemos. Tendría que tener enfrente un rival muy bueno, pero que muy bueno, para perder. Para ganar a la Selección, Estados Unidos, es decir, la NBA, tuvo que formar un auténtico equipo All Star: Kobe Bryant, LeBron James, Carmelo Anthony, Howard, Wade, Bosh... Y jugar, además, al 110%.

Tal es así que el partido, tras el 38-31 del primer cuarto, llevaba camino de acabar 141-128, marcador que trasladado a los 48 minutos que dura un partido en la NBA supone un resultado de 182-148 (el récord sin prórroga está en 173 puntos). Esto nos da idea de la intensidad y el acierto a que se vieron obligados los estadounidenses para no perder ante nuestra Selección.

Otro dato: Boozer y Redd sólo jugaron 26 segundos, cuando ya Estados Unidos tenía el partido ganado tras las dos técnicas que nos pitaron. La Selección obligó a Krzyewski a utilizar a sus mejores jugadores el máximo tiempo posible. Lebron y Kobe jugaron cuatro minutos más de lo que en ellos es habitual. Y es que ayer no podía haber concesiones. La Selección fue mucho rival.