Generación sin ningún complejo

Generación sin ningún complejo

En ocasiones, he detectado cierta animadversión de algunos jóvenes pilotos españoles hacia Fernando Alonso. Supongo que sus motivos tendrán (o no), pero pienso que todos, sin excepción, deberían profesar una buena dosis de agradecimiento al asturiano, a sus éxitos. Sin ellos, pueden tener la seguridad, su evolución no hubiera sido la misma. Que les pregunten a sus antecesores, a otros españoles que buscaron la gloria internacional antes de la era Alonso. Ni los equipos, ni los patrocinadores, ni las instituciones, ni la Prensa contaban con la predisposición y el talante que ahora nos resulta normal. Y de esa evolución se ha beneficiado toda una generación de nuevos valores, que pueden dar rienda suelta a su talento gracias a un entorno mucho más receptivo.

Tres de ellos corren este fin de semana en Macao, el 'Mundialito' de la Fórmula 3. Y no se han ido hasta la otra punta del planeta para hacer bulto en la parrilla, ni mucho menos. Son dignos representantes del nuevo automovilismo español: potente, de calidad y sin complejos. Los resultados en esta locura de circuito chino son casi de tómbola, porque cualquier cosa puede pasar allí, pero lo importante es que Merhi, Campos y Alguersuari pueden mirar de frente a sus rivales. Y, a partir de ahí, intentar ganarles. Porque es muy probable que alguno de los que estos días les darán guerra en Macao, lo haga también pronto en otras categorías, quién sabe si en la mismísima Fórmula 1. Así que no está de más empezar desde ya a poner a cada uno en su sitio...