Marcano, made in Cantabria

Marcano, made in Cantabria

Uno tiene la sensación cuando ve jugar a Iván Marcano, que todo lo hace bien, que no comete errores. Da igual que le pongan de central o lateral izquierdo, siempre destaca. Rápido, intuitivo, listo, técnicamente dotado, y con un futuro por delante prometedor. Cada partido mejora las prestaciones del anterior, está en plena madurez futbolística y su techo aún está por descubrir. Lo próximo, seguro, va a ser su convocatoria para la selección nacional Sub 21, que será su gran escaparate para que la España futbolística conozca mejor a este espigado central cántabro. Tampoco debemos engañarnos; todas estas virtudes que aquí se le reconocen, en el resto del país han pasado desapercibidas. El Racing no vende mucho. La excepción son los ojeadores de la mayoría de equipos de la Liga, que le vienen siguiendo desde hace meses. Pero van a llegar tarde.

El dinero ya no está en el fútbol español, donde todos deben a todos y no hay liquidez, salvo en los casos del Real Madrid y del Barcelona. El resto es una ruina económica, en el que nadie se fía de nadie. Y a por él vienen los alemanes, con euros debajo del brazo. Y el Racing, como loco; necesita vender futbolistas esta temporada por valor de 13 millones de euros para equilibrar las cuentas y, salvo Marcano o Memé Tchité, el resto o son cedidos, o no hay posibilidad de venderlos. Otro producto más de la cantera Made in Cantabria. Y todavía faltan por llegar jugadores de la talla de Sergio Canales, Edu Bedia, Christian Portilla, Mario... La diferencia es que a Marcano le han dado partidos.