La agonía resucita el fútbol

La agonía resucita el fútbol

Agonía, lucha por la victoria: este partido de anoche significa mucho para el Barça, es una cura de humildad. Cuando un grande suspira deseando el final del partido es que se le empiezan a emborronar los apuntes. Este Barça tuvo destellos del fútbol que ahora hace, pero el Espanyol no se rindió, y eso condujo a una lucha que puso a los futbolistas al borde de un ataque de nervios. No fue sencillo vencer al Espanyol, pero tras los goles de Bojan, aquello parecía un paseo primaveral. Lo que sucedió luego es una lección para el Barça, y para el Espanyol.

La agonía es un factor importante en la vida y en el fútbol. Si el Barça se acostumbra a que todo vaya bien se aburrirá de sí mismo. Hasta ahora, en la Liga, se podía hacer una estadística (breve) de los minutos malos, pero en estos dos derbis los azulgrana han acumulado su peor registro. La alegría ha sido Bojan, que venció las resistencias de las redes; y la preocupación es Pinto. A Valdés le tienen miedo porque juega (mal) con los pies. Pinto le imita en lo que tiene de peor. Otro alivio fue Alves, durante gran parte de la primera parte. Pero luego se atenuó, como si Bojan les hubiera evitado antes de tiempo la agonía que vino luego. Pero la agonía resucitó al fútbol.