"Esto va a cambiar, no existe otra solución"

"Esto va a cambiar, no existe otra solución"

Hace unos días, un ex ciclista de los años 90, cuyo nombre mantengo en el anonimato por razones obvias, me hacía la siguiente reflexión: "Cuando yo pasé a profesionales, nadie se planteaba el dopaje como algo malo, sino como algo que había que asumir como una parte más de tu trabajo. Nadie tenía mala conciencia por hacer algo que hacía todo el mundo. Luego los había más o menos valientes a la hora de tomar más de esto o de lo otro, pero ése es otro tema. Por lo que sé, el pelotón ya no funciona así, aunque entiendo que haya dudas, sobre todo después de un año como 2008. Beltrán, Dueñas, Maribel Moreno, el Saunier Duval ¡Uff! Lo del Saunier se veía venir, ¡qué decepción! Nos va a costar, pero esto va a cambiar, ya está cambiando No existe otra solución".

Juan Carlos Castaño sabe lo arraigada que está la cultura del dopaje en el deporte que ahora preside. Durante su ciclo afrontará otros retos, como lidiar con una deuda de tres millones y conducir cuatro modalidades olímpicas (ruta, pista, BTT y BMX) hacia los Juegos de Londres 2012, pero el gran desafío es recuperar la credibilidad del ciclismo y para ello ha lanzado el ambicioso proyecto Prevenir para Ganar, destinado a extirpar el problema desde la base. Tengo que admitir que su candidatura nunca me convenció, porque en su entorno reconozco a demasiada gente que identifico con esa otra época que nos describe nuestro ex ciclista anónimo. Pero una vez elegido, Castaño merece la oportunidad (y tiene la obligación) de intentarlo. Estaremos expectantes.