No acostumbro a importunar estas páginas dedicadas a esos fieles inasequibles al desaliento llamados 'atléticos'. Manolete ni se lo imagina porque no le he avisado, pero hoy quiero que se desayune sus porras y churros habituales con estas palabras de aliento hacia su tropa. Tranqui, compañero del metal, que el Madrid hará sus deberes este sábado en Mestalla y dentro de doce días en El Madrigal. Vamos a ganar los dos partidos para allanaros la carretera hacia la Champions. Al fin y al cabo el madridista es agradecido y nada rencoroso. Vosotros alimentasteis la llama de la Cofradía al meterle 4-3 al Barça y ese impulso espartano llegó a arrinconar al equipo del Louvre a un solo punto durante cuatro minutos (desde el gol de Higuaín al de Henry).

El Atleti fue nuestro gran enemigo deportivo en los años 60 y 70, e incluso dicen los libros de historia que ganó un dobleti en 1996. Por eso prefiero que juguéis la Copa de Europa, porque un cruce con vosotros en octavos acabaría con el mal fario. Y si nos viéramos en la final, que se jugará en el Bernabéu, imagínate Manolete lo que sería verte por fin pisando el santuario de La Castellana. Para que todos esos sueños se cumplan, mi Madrid cumplirá su parte. Os toca a vosotros...