Aires de renovación en Ferrari

Aires de renovación en Ferrari

Los próximos meses van a resultar tumultuosos en el equipo Ferrari. Su crisis de resultados, casi diría que de identidad, exige soluciones y algunas pueden resultar traumáticas. No voy a entrar ahora en si Fernando Alonso es el milagro que esperan en Maranello (que seguramente lo sea), pero lo indiscutible es que en la escudería italiana soplan aires de renovación. No será para esta temporada, porque las precipitaciones en la Fórmula 1 sólo suelen servir para empeorar las cosas, pero el año que viene el enfoque debería ser bien distinto. En Inglaterra dicen que Domenicali ha pedido ya la cabeza de Raikkonen, Massa renuncia a luchar por el título, al presidente Montezemolo empieza a acabársele la paciencia y hasta falla la manguera de repostaje...

Ante tal coyuntura, parece claro que en Ferrari deben comenzar a pensar más en alternativas para 2010 que en intentar enderezar una temporada que tiene poco arreglo. Fue lo que hizo Honda el año pasado y ahí tenemos ahora los resultados de sus herederos, Brawn GP. Personalmente pienso que gran parte del problema de este equipo convertido en mito es la falta de liderazgo, no sé si tanto técnico como del propio proyecto. Desde que se fueron Michael Schumacher y Jean Todt no hay quien sujete con solidez la bandera del Cavallino, porque el título de Raikkonen en 2007 llegó de rebote. Y sin ese faro que guíe la ruta hacia la gloria, difícil será que el barco llegue a buen puerto. Tiempos difíciles en Maranello. Vísperas de la revolución.