Me siento muy orgulloso de que mi predecesor en el triunfo en el Vesubio haya sido, uno de los grandes del ciclismo, Charly Gaul, en 1959. Hoy habrá un tercer ganador en esa cima y a buen seguro que será otro grande. Ojalá sea Carlitos Sastre y que le sirva para meterse de nuevo en el podio.

Yo gané en 1990. Era la 3ª etapa del Giro y ataqué a 80 km de meta con Giuliani, en un puerto de 2ª categoría. Conseguimos una ventaja de 1:30, pero atrás tiraban como locos los compañeros de Bugno. Comenzamos la subida, con un minuto de diferencia y en le primer kilómetro Juliani se quedó de mi rueda. Esto me motivó para forzarme a tope sin el problema de que pudiese atacarme en algún momento de debilidad. A mitad de subida me quedé impresionado por unas duras rampas de más del 12% que estaban adoquinadas. No podía ponerme casi de pie y sentado ni me movía del sitio. Por detrás me anunciaron que Bugno había atacado, estaba a 40 segundos cuando todavía me quedaban 3 km; a falta de uno la ventaja era de 30 segundos y entonces pensé que podía conseguirlo. Llegué con 26 segundos, no fui la maglia rosa por poco, pero si logré la verde de la montaña.