¿Jornada para la historia?

¿Jornada para la historia?

Pues la suerte está echada... o no. Lo digo porque yo no tengo ya ni la más mínima idea de los derroteros que puede tomar la guerra entre la FIA y la FOTA. Hoy podría ser una jornada histórica para la Fórmula 1 si es que las escuderías deciden abandonar el campeonato de Ecclestone, por su avaricia, y de Mosley, por su incompetencia. Los grandes premios tendrían ya en ese supuesto muy poco de grandes, y se abriría una nueva era para el automovilismo de élite de imprevisible desenlace y consecuencias. En cualquier caso, en lo que todos parecen coincidir es en que esta escisión no sería buena para nadie... y sin embargo ahí sigue su amenaza.

Pero también es muy probable que hoy el desenlace no se materialice y que los implicados vuelvan a darse un plazo de gracia para intentar encontrar una solución, lo que no dejaría de sonar a tomadura de pelo. Porque no consigo entender cómo es posible que nadie sea capaz de mediar en el conflicto, de acercar posturas y desbloquear una guerra que, como todas, no conduce a nada bueno. Por eso mantengo la esperanza de que, finalmente, impere la cordura de unos y otros, que la lógica prevalezca y no tiren por la borda un campeonato con sesenta años de historia... y la ilusión de millones de aficionados.