Cristiano, Kaká y aquel 'triplete'

Cristiano, Kaká y aquel 'triplete'

Hace tres semanas que el Barcelona se proclamó campeón de Europa, con lo que cerraba una temporada histórica, la primera en la historia del club que se saldaba con un triplete: Copa, Liga y Champions League. Parece que haga un año. Lo de la Triple Corona le ha durado al Barça menos que unas vacaciones de verano, casi lo que las de Navidad o Semana Santa. Exactamente lo que tardó Joan Laporta, el presidente de los culés, en empezar a borrar con su codo lo que tan primorosamente había escrito Pep Guardiola, el artífice del éxito.

Laporta pasó de estar "tritranquilo" cuando se anunció el fichaje de Kaká por el Real Madrid a ponerse como un basilisco al enterarse de la llegada de Cristiano Ronaldo. Entonces habló de inflación del mercado, de imperialismo y otras lindezas, y en una semana ya nadie se acordaba de la fiesta de Roma ni de nada más. La envidia -sentimiento que consiste no en desear lo que el otro posee, sino en desear que el otro no posea lo que creo que lo completa- hablaba por su boca. Ahora recula; alguien le debe haber recetado mesura. Pero su silencio dependerá de la voracidad de Florentino Pérez en el mercado.