Suráfrica no puede encontrar mejor día para intentar ganarle a España. El buen partido de los Bafana-Bafana ante Brasil y la inesperada derrota de España ante los Estados Unidos provoca sendas y distintas situaciones anímicas que igualan las fuerzas. Esta es la primera razón por la que creo que Suráfrica tiene hoy una ocasión inmejorable para devolverle a España la derrota que le aplicó la Roja hace una semana. Pero hay más. También confío en el juego de Suráfrica y en que Joel Santana, el seleccionador de los Bafana, aproveche que no se trata de un partido trascendente para dejar de lado su faceta más defensiva y para poner sobre el campo a los futbolistas más creativos y verticales de nuestra selección. También para Santana hoy hay examen.

Lo que algunos jugadores hicieron ante Brasil merece aplauso y continuidad. Es el caso de Khune y de Pienaar, los dos líderes de los Bafana, un equipo que necesita más jugadores como ellos, dispuestos no sólo a jugar sino también a competir. Si lo consiguen ante España, la Roja puede sumar su segundo disgusto en la Confecup, lo que sería un serio aviso para el Mundial. Pero los españoles están heridos en su orgullo y hoy pueden salir al campo con ese plus que les faltó ante Estados Unidos y que tuvo su rival, un añadido que finalmente les llevó a ganar el partido. El otro factor a favor de los Bafana está claro: el público y sus vuvuzelas. Con ellos también contamos.

Setumo Stone es periodista del Mail&Guardian.