Laporta: apañao está el que venga

Laporta: apañao está el que venga

E scribo mientras el Barça intenta empaquetar a Etoo destino al Inter. Es la llave para que Laporta fiche a Ibrahimovic, un excelente delantero que en octubre cumplirá los 28 años. Le firmará, dicen, un contrato por seis. Él, Laporta, dejará su cargo el año que viene de no mediar voltereta estatutaria de última hora. Su heredero tendrá delantero centro hasta los 34 años. No será el único. Valdés, Márquez, Henry, Xavi, Puyol, el recién presentado Maxwell superarán por mucho los 30 cuando acaben sus compromisos, magníficamente prorrogados por un presidente que se marcha. ¡Apañao está su sucesor! Le dejará con las manos atadas y condenado a pagar millonadas en rescisión de contratos o a no ganar un título en años, con un equipo envejecido.

Si le sucede un señor de su cuerda sacará pecho: "No está a mi altura". Si el que llega es Sandro Rosell, para él el muerto y que se estrelle lo antes posible. La operación Ibrahimovic es delirante viniendo de quien puso verde a Florentino por el fichaje de Cristiano Ronaldo. Si cierra lo del sueco en las condiciones que se supo ayer, el número rondará los 90 millones de euros. Sin el gancho, la trascendencia y la posibilidad de negocio que el Madrid tiene con el portugués. En cuanto a retorno, no existe comparación posible entre el madridista y el todavía jugador del Inter. Laporta tiene mérito: critica al prójimo, le acaba copiando... y lo hace peor. Sería bonito que se saliera con la suya y escuchar al Balón de Oro de la Economía, Sala Martín, justificar este gasto.