Su sitio es el primer escalón

Fin al debate. Es tan fácil como lo que el Sevilla mostró anoche. Ni juego moderno, ni feo, ni bonito, ni defensivo, ni leches... Fútbol de verdad armado sobre la conciencia de sentirse superior y dominador en cualquier situación. Simplemente, eso es lo que pide la afición. El miedo de Valencia y Pamplona no tiene lugar en este bombardero armado hasta los dientes. Jiménez ha reutilizado las críticas sufridas para encontrar el que parece el camino acertado. No se trata de pintar con colores fantásticos. El asunto radica en anular al rival con personalidad sin temor al fracaso. Acierto pleno del entrenador que está manejando a la perfección el profundo armario que le han puesto entre las manos.

El empuje de Adriano, la renovada versión de Konko, que es bienvenido, la aparición del Navas de siempre ayudan muchísimo a aumentar el potencial del equipo. Detalles que convierten un gran conjunto en un grupo descarado, ambicioso y temido. La Liga española ha sufrido un corte profundo: Barcelona, Real Madrid y... el resto del mundo. El Sevilla debe luchar para superar esa línea. Nadie le exigirá que pelee por la Liga, pero parece que su sitio real está más cerca del primer escalón, el de los elegidos.