El Alcorcón debió pasar de ronda

El Alcorcón debió pasar de ronda

Lo mejor de anoche fue el bocadillo del descanso. ¡Qué sopor! Al juego del Racing me refiero, porque el Alcorcón jugó como los ángeles. Es más, mereció pasar la eliminatoria si miramos el global de los 180 minutos. Está claro que el estado de ánimo influye decisivamente en la Copa y si sales relajado, pensando que eres superior, te hacen un siete. Y es lo que pasó ayer. Los jugadores salieron pensando en los dos goles de diferencia y les faltó enchufarse al encuentro como si uno de Liga se tratase.

Pero el problema es que esa relajación la pueden tener los llamados titulares, no los que tienen que demostrar que pueden tener un sitio en este equipo. Y ni Crespo, Arana, Luis García, Toni Moral, Moratón o Geijo lo demostraron en la noche de ayer. Ya sabemos que en estos partidos es difícil encontrar una concentración colectiva y que cada futbolista tiende más a lo individual, a destacar para convencer al entrenador, pero anoche muchos de ellos, sobre todo Luis García, del que se esperaba mucho, decepcionaron por completo. Sólo Diop dejó claro que puede ser una alternativa (al menos ayer). Y es, sin duda, una buena noticia para Portugal.